la Virgen de las Mercedes se sincretiza con el orisha mayor Obbatalá, creador de la Tierra y el ser humano, asociado a la paz, la pureza, la cabeza y el equilibrio, compartiendo su día de celebración el 24 de septiembre. Ambos, como figuras de misericordia, protegen a los presos y representan la sabiduría y la armonía, siendo una figura central de fe para muchos más allá de la iniciación religiosa.